Con el mundo entre los dedos

sábado, 15 de mayo de 2010

andradita




Me quedé esperando tu silencio...


Como un susurro
escondida entre mis maletas y una hoz

Me quedé aguardando
no sabiendo si ir o no volver
refugiada en las notas zigzagueantes
de mi rincón azul.
Me quedé,
sin saber cómo
sin siquiera desearlo mucho.
Me quedé por otros lazos.
Me quebré entre sus ojos,
mis recuerdos y el devenir.
Me sorprendí en tu frente...

Y, simplemente,


Me quedé…

jueves, 25 de septiembre de 2008

Aviso de Transferencia

Te miro, te pienso, y de cuando en vez recorro tus líneas y en franca inmersión me pregunto qué ocurrirá si no es aire lo que perfunde mis alvéolos.
Y aunque la respuesta parezca evidente, me niego a enredarme en ella y me envuelvo en mis quebrantos disfrazados de búsqueda, me visto de tu piel y sus hendiduras mientras mis ojos piensan otras latitudes.
Me marcho. Me desvelo. Me encojo.
Y los castaños no reparan ni consuelan.
Y como el frío cala los atardeceres, mis huellas se diluyen.
Y toda yo se disipa en la niebla (o al menos lo intenta y se engaña).

.
.
.
.

Resulta ser que lugar no es rincón.

martes, 15 de mayo de 2007

Retorno infantil

¿ Cómo conseguir que el aliento no zozobre ni se extienda sobre él una red acompasada que lo obligue a caminar por los rieles de la respiración?

¿Cómo preguntar tu nombre sin que suene ambicioso, sin que en dos palabras me entregues parte de tu esencia?

¿Cómo sonreir sin que descubras en mis labios las palabras que mis ojos dibujan sin cesar, dejándome expuesta a los caprichos del viento?

No lo sé, pero me encanta ensayar respuestas sobre nuestras mentes abiertas.

lunes, 27 de noviembre de 2006

A modo de blues.

...que le extraño más de la cuenta
que me disfracé de willy wonka
que intento escapar de todo quedándome inmóvil
que sus besos no volverán
que sus ojos no me miran
que me refugio entre sombras
que la luz brilla en demasía
que mis manos se han cansado de brotar
que los días se eternizan
y mis energías se fugan
que aún no entiendo por qué te extraño si aún no te has ido
que sigo sin comprender lo que hay detrás de un suspiro
que la sangre no es más que el riachuelo de mi descontento
que tus manos no son más que un consuelo desgastado
que la idea era no volver a necesitarte
que el motivo era estar bien sin buscar excusas necias
que el tiempo se diluye y sólo pienso en escapar
en volar, en alejarme de este mundo y buscar otro horizonte
en desatar mis deseos y entregarme a la danza de tus pétalos de miel
y encontrar en tus brazos el descanso de mil guerras
y poder mirarte con los ojos limpios y la frente intensa
sólo para respirar que me marcho
sólo para que respires mi partida, sólo para besar una promesa
sólo para decirte que mañana estaré mejor.

martes, 20 de junio de 2006

Ideas suspendidas...

Creo que he dejado de pensar y por un instante he abandonado mi típica postura digna de Rodin.

Mentira; bien sabes que no puedo dejar de hacerlo, pero qué más da... el sólo hecho de que las ideas no se nublen ni se desencuentren, no me agobien ni perturben basta para sentir que me han abandonado por un instante y me dejan disfrutar su ausencia y la libertad exquisita que me embarga cuando no están; cuando no estás a mi lado, sino en el cuarto contiguo.

Creo que he vuelto a "respirar", pero no con esas inhalaciones cortas, necesarias, de ésas que sólo sirven para renovar el oxígeno y desechar el CO2. No. Hoy respiro vientos, hoy respiro a bocaradas, hoy respiro con todos mis sentidos, con todo mi cuerpo conjugado en esa acción. Hoy respiro libertad; hoy respiro y me elevo...

Y se cuelan por mi piel la arena y sus dudas, las hojas y sus reveses, la nieve y sus cuestionamientos; pero mi mente escapa ágilmente a todos los artilugios naturales y me quedo extasiada frente a mi carencia de razonamientos y a la voluptuosidad con que tus labios encienden mis besos y se van (cual marinero nerudiano).

Y ahora mi mundo no es más que sentir, percibirme, ser feliz.

lunes, 24 de abril de 2006

Lapsus depre... ser pacientes.

Estar y no estar, con la mirada en otro horizonte y los ojos perdidos.

Estar y no estar, con el alma tañendo canciones antiguas, de ésas que acallé para poder caminar en una nueva senda, que ya no sé si sea la que cifre palmo a palmo mi vida.

Estar y no estar, como si nada existiese al margen de lo que defino en mis pensamientos (eterna ilusión, con todas mis ansias de que el cartesianismo sea cierto y se lleve mis inquietudes y desvelos montados en sus ideas)

Estar y no estar, estar estando, estar porque cualquier otra condición parece aún más difusa; porque estar en otra parte no siempre es factible; porque los deseos no logran materializar mis inquietudes.

Estar y no estar (o ser y no ser?)... diluyendo hasta llegar a la esencia... y esa maldita unicidad que no comprendo, que se esconde de mis pensamientos, que sólo intuitivamente logro corresponder... ¿qué hacer?, ¿y cómo volver a la antigua quietud que ha sobresaltos vivía mis días? ¿cómo volver cuando todo se ha trastornado y ha empezado a significar de otro modo? ¿cómo volver si no puedo ignorar sus ojos fijos en los míos, desafiando quedamente, alentando con su indiferencia matizada de rocío, asesinando tierna y lentamente lo que quedó de lo que había quedado? (convertida en un reciclaje eterno, en conjunto de despojos ideológicos, de los trozos que quedaron de mí desde antes de los tiempos y que ahora intentan articularse y volverme humana otra vez)

Simples desvaríos... es tiempo de volver al mundo.

jueves, 20 de abril de 2006

El temporal...

... de 36 horas que afectó a la región y que se desplazará hacia el norte.

Definitivamente esa breve reseña radiodifundida no le hace justicia a lo que fue un día y medio de corazón eclipsado por el viento, la lluvia, los sonidos, los árboles tambaleantes y las hojas y ramas esparcidas por doquier, tapizando pasos y sueños con el exquisito aroma de la tormenta.

Y he aquí que mientras camino, las sensaciones se funden con mis ideas y el vendaval se transforma en decisión vital, en una especie de contacto religioso entre mis dudas y la forma sutil con que la naturaleza resuelve mis problemas.

Las ramas, los brotes de hojas que aún pendían de ellas, las hojas multicolores (aquellas que debían caer más temprano que tarde y aquellas que pensaban en sobrevivir alimentadas de savia): todo confundido, revuelto, pero sin despedazarse... como cadáveres magullados que no sangran ni pierden color...

Y me imaginé esa revolución que puede ser el viento y la suavidad con que en ocasiones acaricia mi rostro... y me vi danzando intensamente entre las hojas, volando con ellas hacia un horizonte extraño, diferente, arrancada de raíz de la tierra que me protege y sustenta para llegar a donde su respiración quisiera llevarme... y me dejé llevar y comprendí que es tiempo de destruirlo todo, tiempo de destrozar cada uno de mis pensamientos, tiempo de convertir en desechos los años de búsqueda, los años de preguntas sin respuesta, los días de afabilidad, de diplomacia y cordialidad, corromper desde el fondo mi alma para liberarla de todos los pecados que creí cometer (o me vi forzada a creer así)...

Romper con todo y romperlo todo, con un solo golpe certero y fatal... y dejarme seducir, extasiada por la intensidad del momento.

Creo que necesito una dosis urgente de Wagner o de R. Strauss o ver a Van Gogh a los ojos y preguntarle qué hizo para abarcarme en su pintura... o simplemente acercarme a Nietzsche y comprender lo que ocurre en mi interior.

Un beso.